lunes, 6 de enero de 2020

Congreso de Angostura ratifica a Bolívar título de Libertador


ACTA 245

En la capital de Guayana, a 6 de enero de 1820. Reunidos en la sala de sesiones los señores presidente y diputados Francisco Antonio Zea, Juan Germán Roscio,
Antonio María Briceño, Diego Bautista Urbaneja, Diego Vallenilla, Eusebio Afanador, Luis Tomás Peraza, Domingo Alzuru, Ramón García Cádiz, Juan Martínez, Onofre Basalo y José Ignacio Muñoz, se leyó el acta del día de ayer y el proyecto de decreto presentado por el señor presidente, encargado de formarlo, del reconocimiento nacional al jefe y ejército libertador de Cundinamarca, que el soberano congreso aprobó.
Decreto. El soberano congreso, deseando dar al jefe y al ejército libertador de Cundinamarca un testimonio del reconocimiento nacional, ha venido en decretar y decreta lo siguiente:
Artículo 1° El General Bolívar queda condecorado con el título de Libertador, de que usará en todos los despachos y actas del gobierno, anteponiéndolo al de Presidente, y lo conservará como una propiedad de gloria en cualquier otro destino, y en el retiro mismo de los negocios públicos.
Artículo 2° Su retrato será colocado bajo el solio del congreso, con esta inscripción en letras de oro: "Bolívar, Libertador de Colombia, Padre de la Patria, terror del despotismo", y más abajo, en pequeños caracteres: "Decreto del Congreso en Angostura a 6 de enero de 1820".
Artículo 3° No solamente los vencedores de Boyacá, sino todos los individuos del ejército que emprendió esta campaña memorable, incluyendo los que perdió en el paso de los Andes, los patriotas que se le reunieron y las personas que se han distinguido extraordinariamente en favorecerlo, sean hombres o mujeres, quedan declarados y serán reconocidos por Libertadores de Cundinamarca. Sus nombres se inscribirán con la separación y clasificación correspondiente en la columna del triunfo de Boyacá, decretada por la asamblea de Bogotá.
Artículo 4° Los Libertadores de Cundinamarca llevarán la decoración de una medalla en que esté grabado y esmaltado de rojo su nombre, y debajo estas palabras: Cundinamarca libertada, 1810. Esta medalla, orlada de una corona de laurel, esmaltada de verde, será de oro guarnecida de esmeraldas para los generales, de oro sin guarnición para los oficiales y ciudadanos empleados, y de plata para los soldados y ciudadanos sin destino público. Los militares la llevarán pendiente de una cinta roja en el segundo ojal de la casaca, y los ciudadanos, de una cinta azul celeste.
   Artículo 5° Las viudas de los militares muertos en la campaña llevarán pendiente del cuello la decoración correspondiente a sus maridos, como partícipes de sus trabajos y de patriotismo.
   Artículo 6° Los nombres de los libertadores de Cundinamarca se proclamarán por bando con música militar y salva de artillería en las capitales de departamento y plazas fuertes, y en las demás ciudades con la posible solemnidad en todas las fiestas del aniversario del establecimiento de la República, quedando desde ahora inscritos en los libros municipales y en todos los registros públicos.
   Tendrálo entendido el supremo poder ejecutivo, y dispondrá lo necesario a su cumplimiento.

sábado, 28 de diciembre de 2019

Voluntad Popular pide perdón al país


Luego de una intensa jornada de reflexión, la dirigencia nacional del partido Voluntad Popular decidió, esta madrugada del sábado 28 de diciembre, asumir su responsabilidad, ante el país, por  la situación de guerra económica que vive Venezuela para lograr el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro.
Leopoldo López, quien asumió ser el líder de esta organización de Derecha, confesó ante los medios que asistieron a la rueda de prensa, que la crisis, es producto de las sanciones que ellos solicitaron ante el gobierno de Donald Trump.
Única salida
 “No hemos logrado ganar con votos. Esa es la única salida. Apoderarnos de las riquezas de Venezuela con la ayuda del Imperio norteamericano, nuestros padres fundadores”, expresó López, quien mostró una mirada desorbitada y perdida. Dijo que a pesar de que miles de países han reconocido a Juan Guaidó como presidente interino, éste no ha logrado tener un discurso coherente.
Por su parte, el autoproclamado presidente de Venezuela, Juan Guaidó, declaró que el llamado que hizo desde el 23 de enero, con el cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres, se convirtió en una simple frase publicitaria. “Leopoldo y Lilian son los autores de esa campaña”, confesó.
Acotó que se dio cuenta que la única usurpación que hay en Venezuela es haberse declarado presidente de Venezuela, y, por lo tanto asumirá su responsabilidad ante el daño ocasionado al país. “Las autoridades legítimas de nuestra patria que me impongan las sanciones que merezco por tan infame patraña”, anunció.
Se le preguntó a la dirigencia de Voluntad Popular que pasará con el resto de los representantes de ese partido que se encuentran en Estados Unidos y Europa. Leopoldo López expresó que ellos seguirán en el exterior. “Nosotros vinimos a Venezuela, solo a cumplir con el día de los Inocentes”, y lanzó una fuerte carcajada.



jueves, 19 de diciembre de 2019

Curiosidades del Congreso de Angostura


Diciembre de 1819
Luego de sometida a la plenaria el proyecto de la Ley Fundamental de Colombia la cual resultó aprobada por unanimidad, se procedió a la elección de presidente del Estado de Colombia, resultó electo por uniformidad de los 17 votos su excelencia el General Simón Bolívar.
Se continuó la de vicepresidente obteniendo Francisco Antonio Zea 14 votos. En este acto, el General Rafael Urdaneta, el Gobernador Político de la provincia de Antioquia, Manuel Restrepo, y General Francisco de Paula Santander obtuvieron un voto respectivamente.
Con respecto a la elección de los vicepresidentes de Cundinamarca y Venezuela, Juan Germán Roscio manifestó que antes de procederse, debían prescribirse las reglas y facultades de estos empleos; moción apoyada por el diputado de Margarita Domingo Alzuru, por lo se declaró que una ley establecería, sin que por su falta se suspendiese la elección.
Para vicepresidente de Cundinamarca fue electo Francisco de Paula Santander, con 16 votos, y para Venezuela, Juan Germán Roscio, con 13 votos; dos votos Rafael Urdaneta, uno el General José Antonio Páez. Para la vicepresidencia de Quito, se aprobó se eligiese en aquella capital.
Luego de publicadas solemnemente dichas elecciones por su respectivo orden, los asistentes a esta sesión aclamaron a los electos con repetidos vivas. Posteriormente, el Presidente levantó la sesión.

Bolívar jura como presidente de Colombia
El 24 de diciembre, en la capital de Guayana, en la sala de sesiones se nombró una comisión de diputados integrada por Francisco Conde, Ramón García Cádiz y Luis Tomás Peraza para conducir al presidente del Estado de Colombia, General Simón Bolívar, al palacio del soberano congreso para prestar el juramento respectivo, donde fue recibido en una gran ceremonia protocolar. Con su acostumbrada moderación, luego de su juramentación, el Libertador dijo que aunque sus talentos y luces no eran tales como deseaba el cuerpo soberano para el desempeño de tan grandiosa empresa, no excusaría fatiga ni sacrificio alguno para el exterminio de los enemigos de la República. Añadió que sus operaciones serían siempre marcadas con el debido respeto a las leyes que el soberano congreso dictase; y que hacía presente que siendo conveniente dar al Poder Ejecutivo todo el lleno de su autoridad que demandaba el actual estado de la guerra, sus lazos no debían estrecharse de modo que se rompiesen.

martes, 10 de diciembre de 2019

TIAR: Títeres Imperialistas Asesinos Represores


Como una de esas leyendas urbanas que pretende sembrar en el imaginario de los pueblos, el presidente de Colombia, Iván Duque, ha tratado de crear con el cuento del TIAR que Venezuela es un peligro para Latinoamérica. Sin mirar hacia atrás, el Porky neogranadino habla de cerco diplomático para aislar a nuestro país para lograr la paz en la patria de Bolívar.
Duque, quien tiene varias semanas con fuertes protestas que desnudan la crisis de Colombia, no ha podido contener a los movimientos sociales, sindicales, estudiantiles, indígenas en las calles, quienes reclaman justicia por las muertes de sus líderes. Es como el ciego que no quiere ver su propia crisis.
Su preocupación, y casi llora por ello, es la situación migratoria de los venezolanos que le ha reportado a su gobierno más de 100 millones de dólares. Es decir, el Paraco presidencial vive de la situación crítica que atraviesan los venezolanos en Colombia.
Al igual que el gobierno imaginario de Juan Whitedog que atraviesa una de las peores tramas de corrupción que ha vivido Venezuela en 200 años de vida republicana, Duque ha conseguido con el envío de ayuda humanitaria, tanto del gobierno norteamericano como de la Unión Europea, el mejor negocio de su vida.
Pero la fantasiosa posición del gobierno colombiano, es señalar que Venezuela pretende “entronizar” al narcotráfico en Colombia, por lo cual representa una amenaza. Hay que ser caradura para utilizar ese argumento, cuando es demostrativo que la propia Organización de Naciones Unidas (ONU), calificó a la República Santandereana como el mayor productor de drogas en el mundo. Eso es como el ladrón que comete la fechoría, y al intentar huir tras una persecución policial, ese delincuente grita “allá va el ladrón”.
Con una historia de violencia por más de 70 años, el SubPresidente Iván Duque manipula a la opinión pública, cuando dice que en el territorio venezolano se encuentra la guerrilla. Lo que si es claro es que el gobierno nacional, presidido por Nicolás Maduro ha dado duros golpes continuos al paramilitarismo, con el desmantelamiento de la banda los Rastrojos, guardia pretoriana del Autoproclamado.
Como agente del secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, es claro que Iván Duque se autoproclamó como jefe de campaña del uruguayo, para continuar al frente de ese cargo.
Luis Almagro, tal como lo logró en Bolivia, pretende urdir un Golpe de Estado en Venezuela, porque ese es el compromiso hecho con el gobierno de Donald Trump, entregarle en bandeja de plata las riquezas de nuestro país, con la complicidad del gobierno colombiano.
Duque, como excelente alumno de Álvaro Uribe Vélez, pretende resarcir los anhelos de Francisco de Paula Santander, enemigo acérrimo del Padre de la Patria, y autor intelectual de la muerte del Gran Mariscal de Ayacucho en Berruecos, de invadir este territorio lleno de historia soberana, independiente y libertaria.
La obsolescencia del TIAR, como instrumento de intervención militar en el suelo patrio, es un escenario bufo del Grupo de Lima que pretende decidir el destino de los pueblos Latinoamericanos.
Ese Tratado Interamericano de Asistencia Reciproca más que un conjunto de acciones belicistas contra la República Bolivariana de Venezuela, es una agrupación de TITERES IMPERIALISTAS ASESINOS REPRESORES

lunes, 9 de diciembre de 2019

8 de diciembre Día de la Dignidad: Unidad, lucha, batalla y victoria

8 de diciembre, fecha inolvidable para el pueblo venezolano. Ese pueblo de a pie que se fue detrás de Hugo Chávez el 4 de febrero de 1992, cuando en 49 segundos, por radio y televisión, dio a conocer esa pequeña frase del ¡Por ahora¡.
Ese sábado de diciembre de 2012, el Comandante Supremo anunciaba su determinación de designar a Nicolás como el candidato de la Patria, en caso de sobrevenir un hecho que conllevara a la convocatoria de un nuevo proceso electoral.
Esa noche, del 8 de diciembre de 2012, Chávez, como el Libertador, abrió su corazón ante el delirio del Chimborazo cuando el Tiempo se le presentó como un venerable viejo, para avizorar el futuro que le depararía a la patria, ante una eventual ausencia de su liderazgo. Esa noche, los venezolanos fieles creyentes del pensamiento y guía del Comandante, vimos que él seguía al píe de la letra esa extraordinaria prosa del Padre Simón Bolívar: cito "Observa —me dijo—, aprende, conserva en tu mente lo que has visto, dibuja a los ojos de tus semejantes el cuadro del Universo físico, del Universo moral; no escondas los secretos que el cielo te ha revelado: di la verdad a los hombres".
Esa noche Chávez reveló ante el pueblo lo que el cielo le contó. Dijo la verdad. En metáfora le describió a la nación que ocurriría después del 5 de marzo de 2013. Ya Hugo Chávez sabía que trascendería la inmortalidad. El soñó su propio viaje hacia un plano superior.
No se equivocó Pablo Neruda en su Canto a Bolívar. La historia es la historia. Ella tiene su pasado, su presente y su futuro. Y aquí se transmutó el pasado que representó el Padre Libertador para que 200 años después, como en el poema de Neruda, se hace presente la imagen de Chávez:
Tu espada está naciendo
Otra vez tu bandera
Con sangre se ha bordado
Los malvados atacan
Y allí están los malvados, Hugo, representado por la Derecha que trata de apropiarse de tú simbología para engañar a un pueblo que aprendió con el Comandante que ya en Venezuela no hay pendejos.
Ahora todos somos hijos, hermanos, sobrinos, nietos del Comandante Eterno de la Revolución.
Su sentencia del 8 de diciembre de 2012 sigue siendo el grito que se expande en el horizonte para seguir consolidando el proceso revolucionario y socialista: Hoy tenemos Patria! Y pase lo que pase en cualquier circunstancia seguiremos teniendo Patria, Patria perpetua. No faltarán los que traten de aprovechar coyunturas difíciles para, mantener ese empeño de la restauración del capitalismo, del neoliberalismo, para acabar con la Patria. No, no podrán, ante esta circunstancia de nuevas dificultades -del tamaño que fueren- la respuesta de todos y de todas los patriotas, los revolucionarios, los que sentimos a la Patria hasta en las vísceras como diría Augusto Mijares, es UNIDAD, LUCHA, BATALLA Y VICTORIA.
Hoy mi compromiso sigue incólume, tomando como ejemplo la fuerza que siempre imprimió Hugo Chávez desde el primer día que lo vimos aquel 4 de febrero de 1992, cuando comenzaba la esperanza de un nuevo país. No somos recién llegado a la esperanza que conforma la revolución.
Independencia y Patria Socialista
Viviremos y venceremos
Hasta la Victoria Siempre

lunes, 25 de noviembre de 2019

Bolívar contra Bolívar: Por qué las oligarquías imponen los Golpes de Estado

Para nadie es un secreto que en los mismos tiempos de la colonia, antes de constituirse la República de Colombia, los medios impresos han ejercido influencia en los gobiernos y en cualquier sociedad para lograr sus objetivos liberales, como instrumento ideológico. Hoy llegó a mis manos un trabajo donde el insigne maestro Simón Rodríguez ejerce una magistral defensa de nuestro Libertador Simón Bolívar, ante los ataques de la imprenta oligárquica para calificarlo como dictador y emperador. La guerra mediática, llevada a cabo en pleno nacimiento de la República de Bolivia, emprendida desde Colombia, Chile, Argentina, Perú y Ecuador es la evidente manera de cómo por siempre los medios imponen gobiernos neoliberales.
Editado por la Fundación Biblioteca Ayacucho, en la gestión de Ernesto Villegas, como ministro del Poder Popular para la Cultura, esa edición de Bolívar contra Bolívar, con prólogo y selección de textos de Nelson Chávez Herrera,  evidencia que los grandes “cacao” deciden el destino de los pueblos. Cada coma, cada punto de esa narrativa del sabio Samuel Robinson no cambia en nada  lo que acaba de suceder en Bolivia, con el Golpe de Estado asestado contra Evo Morales Ayma, el primer indígena presidente de esa nación.
La historia se remonta a 1826, cuando en la guerra mediática emprendida contra Bolívar, lo acusan de querer  coronarse rey y emperador de América en el Congreso Anfictiónico de Panamá. Más aún, calificativos que rayan en el desprecio, y que demuestra las divisiones sociales que se vive en el altiplano andino. Por ejemplo esta: ¡¿Qué dirán las naciones europeas, cuando lleguen a saber que Bolívar es Zambo?! – ¿Qué dirán los rubios de Inglaterra, los de Escocia, los de Francia, y sobre todo los de... Andalucía?! – ¡un Zambo, mandando Indios en el Perú!...
El concepto republicano de El Libertador Simón Bolívar, para la construcción del Patria Grande radicaba en la nacionalización de las minas, eliminación del tributo indígena, abolición del trabajo esclavo, transferencia de los recursos dados a la Iglesia para destinarlos a la educación (Situación  que la Conferencia Episcopal Venezolana no le perdona a Hugo Chávez, al abolir de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, a la religión católica como la única, garantizando en el artículo 59, la Libertad de Religión y Culto).
Si tienen posibilidad de acceder a esta obra: Bolívar contra Bolívar, entenderemos que el coloniaje no es solo someter a una sociedad, sino también es la actitud particular de quienes creen tener la supremacía para descalificar a su semejante, con fantasmas que van surgiendo en su conciencia. Nadie está por encima de otro. Para ello, Simón Bolívar y Hugo Chávez nos dieron las herramientas para consolidar la revolución. Lo demás es circunstancial.

miércoles, 20 de noviembre de 2019

La octava estrella de nuestra bandera


Para el imaginario de la oposición y otros sectores de la Ultra derecha venezolana, la bandera con la ocho estrellas fue un invento del Comandante Eterno Hugo Chávez, tema que hoy, en el 2019, tratan de resucitar. Por consiguiente, la identidad de nuestra enseña patria, conllevó a serios enfrentamientos en el 2006, cuando el conocido “Cabeza de Motor”, Oscar Pérez, en un acto en la plaza de Chacao, desconoció la bandera de ocho estrellas, calificándola como representativa del”autoritarismo", y la de “siete estrellas es la de la libertad y la democracia”.
El desprecio hacia nuestra historia, ha sido, y es, uno de los elementos más controversiales con los cuales una oposición apátrida pretende desdibujar nuestra identidad Patria. Sin embargo, en el contexto de lo que nos enseñó el Comandante Hugo Chávez, debemos recordar el alfa y omega de la reconstrucción de nuestros símbolos patrios.
El 20 de noviembre de 1817, el Libertador Simón Bolívar, como Jefe Supremo de la República, decreta en Angostura la inclusión de una octava estrella a nuestra bandera nacional.
El Padre de la Patria establece como elemento fundamental para esa octava estrella, el aumento del número de provincias que componen la República de Venezuela. Esa octava estrella corresponde a Guayana, decretada como tal el 15 de octubre de 1817, luego de la acción fluvial sobre el Orinoco y los fortines de Guayana la Vieja, la cual junto a la Batalla de San Félix de marzo anterior, completaron la liberación de la estratégica Provincia de Guayana.
Originalmente las siete estrellas corresponde a las provincias que enviaron sus representantes al Primer Congreso Constituyente del 5 de julio de 1811 y que juraron la Independencia: Caracas, Barcelona, Cumaná, Margarita, Barinas, Trujillo y Mérida. Estas provincias hasta 1817 estaban simbolizadas en el Pabellón Nacional hasta que en 2006, el comandante Hugo Chávez Frías, en el contexto de la Constitución de 1999, luego de un debate nacional da como resultado el Acuerdo de la Asamblea Nacional del 6 de marzo de ese año, en el que se aprueba incorporar la octava estrella en la Bandera Nacional.