lunes, 13 de septiembre de 2010

Criminalización de los cuerpos policiales


En nuestra tertulia anterior, domingo 5 de septiembre, analizamos la situación eléctrica en el estado Anzoátegui. Nuestra apreciación, de acuerdo al informe presentado por el gobernador Tarek William Saab, no estuvo alejado de la realidad. De acuerdo a la labor investigativa de los cuerpos de seguridad, están tras la pista de quienes han elaborado ese plan.

Ahora, otro de los temas que se encuentra en la palestra es la criminalización de los órganos de seguridad ciudadana. Prueba de ello, es la reiterada utilización de los enfrentamientos policiales como parte del hecho delictivo.

En una visita reciente al estado Anzoátegui, el ex alcalde de Chacao, Leopoldo López, en un foro, destacó que el principal problema de los anzoateguienses es la inseguridad. Y que los venezolanos le temen más a los funcionarios que a los propios delincuentes.

Este argumento forma parte de una matriz de opinión generada desde el propio seno de la oposición, con la ayuda, inclusive, de algún fiscal del Ministerio Público, que en lugar de cumplir con su misión de investigar, se convierte en un testigo más del hecho como tal.

Argumenta, este funcionario, con una narrativa de novela policíaca, al propio estilo de Raymond Chandler, padre de este género literario, quien utiliza un estilo irónico, frase imaginarias, ingeniosa y ácida, el comportamiento de los funcionarios. Por ejemplo, en un expediente, el fiscal detecta dentro de su gran imaginación que “resulta vil y despreciable las conductas de los funcionarios, al privar de la vida a seres humanos, solo por el simple deseo de matar o por el goce del mal ajeno”. Acaso este ciudadano tiene facultad directa para psicoanalizar al funcionario policial. Lo determinó con un evaluación hecha por el psicólogo forense al servicio de la administración de justicia. Creemos que no.

Incluso está recusado en un caso, donde dio competencia a una de las víctimas para gestionar diligencias de manera directa con un caso que se dilucida en los tribunales. Ese fiscal, él sabe quién es, se jacta de presentar a casi 300 policías presos como un trofeo ganado en una competencia deportiva.

Sin embargo, volviendo a la criminalización de los cuerpos policiales, ahora la arremetida de la oposición y de grupúsculos que viven del dolor de la gente, es contra el jefe del CORE 5, General Antonio Benavides, a quien han tergiversado en sus declaraciones, al decir que los muertos por enfrentamientos entre los cuerpos policiales, no es un homicidio o una víctima del hampa, ese es un delincuente que se enfrentó a la policía”. Sin embargo, ya las eternas plañideras han salido a pedir la cabeza del oficial de la Guardia Nacional.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Sabotaje eléctrico

Con menos de cincuenta años de construida, la subestación Barbacoa, ubicada en el municipio Bolívar, no había tenido una contingencia como la ocurrida el jueves 2 de septiembre, cuando ocurrió una explosión en el transformador de 100 MVA que suministra energía eléctrica a Bolívar, Píritu, Peñalver (Circunscripción tres), Sotillo y Urbaneja (Circunscripción cuatro), además de Bruzual y San Juan de Capistrano. Qué casualidad.
Y qué casualidad, faltando apenas 22 días para las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre, ocurre este hecho que afectó a casi un 70 por ciento de la población del estado Anzoátegui, donde se concentra el mayor número de electores. Esto sin contar los constantes apagones que a diario se suscitan en los sectores populares.
Qué casualidad que el incendio comenzó a las 3:45 de la tarde, pero ya a las 2 de la tarde diversas comunidades del municipio Simón Bolívar estaban sin “luz”. Los propios vecinos de la subestación Barbacoa, en declaraciones a un medio local, comentaron que, en tantos años, primera vez que ocurre esa contingencia.
Sin embargo, para quienes tenemos la posibilidad de realizar análisis de entorno, desde el punto de vista periodístico, se pudieran manejar varias hipótesis. Una de ellas pudiera enmarcarse en un sabotaje eléctrico, tomando en cuenta las disidencias políticas que internamente existen en la industria energética. Por supuesto, eso hay que probarlo a través de una investigación.
Allí, en el seno de Cadafe hay varios factores que encierran diversos factores. Pero, afortunadamente hay un sector de la industria eléctrica que hace su trabajo de manera solidaria. Hay otros que se acercan hasta la mesa estratégica de la oposición para jugar al caos.
Para nadie es un secreto que las fallas en la energía eléctrica, la descalificación de los cuerpos policiales, el caos en la recolección de la basura, entre otros, forma parte de una cartilla generada por quienes no tienen la posibilidad de lograr los votos por la vía democrática. Dios quiera que en Cadafe no esté ocurriendo lo mismo que pasó en Pdvsa en el 2002: Un sabotaje.

Leopoldo López prevé la derrota de la oposición


En estos tiempos de campaña parlamentaria, el menú mediático representado por los dirigentes de oposición demuestra, una vez más, la falta de coordinación en las declaraciones que los aspirantes a la Asamblea Nacional hacen ante los medios de comunicación.
Como ejemplo de ello, esta semana que está por concluir, hay tres personajes que demuestran la antítesis del discurso político y la falta de coordinación en el mensaje que conlleve a la captación de un electorado que, una vez más, no arriesgará su voto con un proyecto que busca colocar en la AN a los que ocuparon cargos de representación en los 40 años de la democracia representativa.
El primer personaje, es un pintoresco y bufónico ciudadano que desprestigió al Consejo Nacional Electoral, que en el ejercicio del cargo de presidente del órgano comicial hizo célebre la frase “el 28…el 28”. Quién no recuerda a Eduardo Semtei, devenido ahora en dirigente de la oposición. Su carnavalesca actuación en el programa Entre Periodistas, que se transmite por Televen, moderado por Carlos Fernándes y una novel periodista que solo lee mensajes que favorece a los candidatos de la Mesa de la Unidad Democrática, Semtei dijo que en Caracas, Zulia, Carabobo y Miranda los representantes antichavistas sacarán todas las curules. Si esa aseveración del ex dirigente de izquierda es igual a la célebre proclama del 28, estamos, entonces, frente a otro chiste.
El otro personaje está ubicado en el estado Anzoátegui. Se trata de Rodolfo Rodríguez, quien tiene por mérito haber derrotado al vetusto cogollo adeco. Sin embargo, su lenguaje es más de lo mismo. Cuestionamiento a las políticas públicas del gobierno, no queremos comunismo ni socialismo. Pero cuando se le consulta sobre hechos reales como las misiones, la respuesta es la misma “lo que hay es corrupción”. Es decir un mensaje vacío, producto del oportunismo y del caradurismo.
Sin embargo, dentro de la procesión dialéctica de la oposición, hay una que desnuda lo que ocurre en las organizaciones que están en contra del presidente Chávez. Las declaraciones de Leopoldo López son lapidarias, y encierra la realidad de quiénes han dirigido la estrategia de los disidentes del gobierno.
Ha dicho el ex alcalde de Chacao que la dispersión en la MUD contribuye a enviar mensajes contradictorios a los electores, lo cual conllevará a obtener menos diputados de lo que han contabilizado en su estrategia de campaña. Si lo dice López es verdad. El conoce como se manejan sus ex compañeros de Primero Justicia. López indirectamente hace responsable a Julio Borges y compañía de la derrota que sufrirá la oposición el 26 de septiembre.

Hasta cuándo

Ahora resulta que en este disparatado mundo los papeles se han cambiado. El hampón, el antisocial, el sociópata entre otros denominativos son las víctimas, mientras que el verdadero garante de la seguridad de las personas es sometido al escarnio público, como si estos fueran los delincuentes. Esta situación la construyen y las hacen pública, cuando tienen el respaldo de quienes deben ser los garantes de la investigación penal.
Pero, qué se puede esperar de quienes nacieron, y han crecido, en un núcleo familiar donde el alcohol, ha sido el ejemplo a seguir. Este cuadro generalizado en una sociedad corrompida a servido de hervidero para la formación de los transgresores de la ley que luego de cometido sus delitos a hora son hijos de Dios.
Sin medir las consecuencias, el sociópata es capaz de construir un mundo fantasioso, que si lo calificamos en el contexto legal, esto no es más que una simulación de un hecho punible, con el fin de presentarse como una víctima de una cadena de sucesos que le permita señalar que su vida peligra por la actuación de un número que se ha convertido en parte obsesiva de su desquiciada mente criminal. Es decir es el cinco o la quíntuple diversificación del ser humano. Para quienes analizan el hecho social bajo el contexto de la investigación periodística, quizás no compartan con este servidor lo antes señalado. Sin embargo una importante porción de la población si está convencida que el delincuente no tiene porque mostrar un rostro Lombrosiano, debido a que la mayoría de las veces esconden su comportamiento delictual tras una faceta de comerciante y hasta en el propio ejercicio profesional. Llegando al extremo de autocalificarse de honesto. Por eso reiteramos, hasta cuándo.

Estrategias diabólicas de la oposición

La actual campaña electoral, con mira al proceso parlamentario del 26 de septiembre, solo se diferencia de las anteriores por el uso que le viene dando la oposición a temas puntuales que buscan conmocionar a la población.
Como ejemplo palpable de la actitud de dirigenzuelos que constantemente se descalifican asi mismo, es que vemos en los medios de comunicación social el desprestigio a que son sometidas algunas instituciones de gobierno. Entre ellos, los cuerpos policiales, Pdvsa Mercal, y hasta el propio presidente de la Republica.
Hoy no es la preocupación de denunciar cualquier situación que afecte a los ciudadanos, sino como un medio, tal como lo definió Maquiavelo, para obtener el favoritismo del electorado y de esa manera llegar a la Asamblea Nacional. A muchos de ellos, especialmente en el estado Anzoátegui, el uniforme del Uribismo se les quedó frío en el escaparate, luego que se abrieran las compuertas de la paz en el encuentro sostenido entre los presidentes de Venezuela y Colombia, suscitado en Santa Marta.
Otros organismos desprestigiados por la oposición son los cuerpos policiales. Para nadie es un secreto que situaciones enmarcadas en resistencia a la autoridad o enfrentamiento, de inmediato la participación de funcionarios policiales son presentadas como homicidio calificado, simulación de hecho punible, motivos fútiles e innobles, entre otros, sin conocerse los resultados técnicos. Y ya dirigentes de oposición de la peor calaña, hacen pública esta situación de manera distorsionante. En próxima entrega haremos un análisis mas detallado de estas circunstancias.

El escondite de Álvaro Uribe y la estrategia de Bogotá


Ayer, tal como lo anunció el gobierno colombiano, asumió la presidencia de la República neo granadina Juan Manuel Santos, considerado por algunos comentaristas como uno de los hombres fuertes del Alvarismo. Lo que es lo mismo la continuación de la gestión de Álvaro Uribe Vélez en el poder de Nueva Granada.
Sin embargo, lo importante no es que Santos, ex ministro de la defensa colombiano y responsable del ataque al campamento donde muriera el otrora jefe guerrillero de las Farc, Raúl Reyes, reciba la primera magistratura de Nariño, sino qué hará Uribe Vélez después que entregue el poder.
Fíjense ustedes la perla noticiosa que nos traen los medios de este sábado 7 de agosto, cuando se cumplen 191 años de la batalla de Boyacá, gesta que lideró el héroe epónimo de Barcelona, José Antonio Anzoátegui y libertó a Colombia . “El presidente Álvaro Uribe, vivirá junto con su familia en una ciudadela policial de Bogotá bajo extremas medidas de seguridad”. Es decir ya tiene su escondite. Y por qué será.
La información que detalla que Uribe Vélez vivirá rodeado de generales de la Policía Nacional, no tiene otro elemento que el resguardo de su vida, ante las atrocidades cometidas contra el pueblo colombiano, tomando en consideración el número de desplazados hacia otros países. Y, finalmente, los casi 2 mil muertos encontrados en una fosa común del sector La Macarena.
Sin embargo, el propio Álvaro Uribe Vélez ha utilizado el célebre chiste de “Allá va el ladrón”, cuando a través de su abogado Jaime Granados, ha tomado la delantera para denunciar al mandatario de Venezuela, Hugo Chávez y demandar al Estado venezolano ante la Corte Interamericana de los Derechos Humanos y ante la Corte Penal Internacional por permitir la presencia de las Farc y el ELN en territorio venezolano.
Es evidente que todos conocemos la posición de ciertos personajes de la política venezolana, quienes están apostando, desde ahora, a la culpabilidad de Hugo Chávez, como parte de una estrategia internacional que ayude a la oposición para el proceso parlamentario del 26 de septiembre.